Navegar de forma segura en internet
Guía para navegar de forma segura en internet
El internet es un vasto mundo de posibilidades informativas que también esconde muchos riesgos que pueden afectar a organizaciones, a individuos y a la niñez por igual.
Por ello, es necesario educar sobre el uso seguro de esta herramienta digital, para así explotar las posibilidades que brinda de la mejor forma y sin consecuencias negativas para la salud mental o física de las personas.
Naturalmente, para educar y prevenir sobre los riesgos, deben de conocerse primero. Estos son los ataques más comunes en la web:
- Robo de datos: Pueden ser datos bancarios, información personal, datos empresariales y contraseñas, entre otros.
- Virus: Gran cantidad de virus con programa o código malicioso están presentes en muchas páginas. Una vez que se activan, estos buscan modificar el funcionamiento de los dispositivos móviles o equipos de cómputo.
- Phishing: Es una de las técnicas más empleadas para engañar y robar contraseñas, pues se finge ser una institución o persona de confianza.
- DDoS: Son ataques que generan gran cantidad de peticiones a un sitio, con el propósito de que el servicio de este caiga.
- Spam: Este término, también conocido como correo no deseado, se refiere a cualquier tipo de comunicación masiva indeseada; por lo general, son emails. Normalmente estas comunicaciones no son confiables y deben descartarse si no se conoce su origen.
En vista de los múltiples riesgos que pueden encontrarse en internet, es necesario adoptar medidas preventivas.
¿Cómo es un internet confiable, blindado y armonioso?
Estas son sus principales características:
1. Navegación segura
No es recomendable visitar sitios web sospechosos. Basta un solo clic para ser víctima de un virus o robo de datos. Solo se debe acceder a los que cuenten con un certificado SSL (en estos sitios la URL llevará un https en lugar de un http, lo cual es garantía de seguridad).
Un sitio es malicioso por su link. Este puede aparentar ser fiable, pero al acceder redirigirá al usuario a una web falsa que imita ser una legítima.
En ocasiones, los enlaces maliciosos se reciben como mensajes de correo electrónico pidiéndole al usuario datos personales para que instale algún tipo de malware (programa maligno) en su dispositivo, un peligro informático que también debe evitarse a toda costa.
2. Antivirus
Esta es la medida de seguridad más básica que se debe tener para navegar en internet. Un antivirus es un programa para detectar y eliminar virus informáticos, es decir, que son el primer filtro de protección contra amenazas que pueden dañar la reputación de un individuo o una empresa.
Existen soluciones para que cualquier tipo de dispositivo cuente con la mejor protección de un antivirus y un internet seguro que le prevenga de futuras fallas.
3. Contraseñas
Este elemento juega un papel fundamental, pues las contraseñas pueden ser una brecha de seguridad en la red.
Lo más seguro es contar con contraseñas distintas en las plataformas que se usen, ya sea en Google, Facebook, LinkedIn, Instagram o Twitter, solo por mencionar algunas.
Si se cuenta con una misma contraseña para todas las cuentas y hackean alguna red, será muy fácil que puedan obtener datos de las demás redes intentando ingresar con la misma clave.
Riesgos más allá de los hackers y ciberdelincuentes
Hay otros riesgos que asocian a la navegación en internet, donde la niñez y la adolescencia son más vulnerables. Por ejemplo, el entorno digital puede incluir información sesgada, con estereotipos de género, discriminatoria, racista, violenta, pornográfica, de explotación y que usa un discurso de odio, así como narrativas falsas, información errónea y desinformación.
Otros peligros en línea pueden llevarlos a conductas erróneas como participar en actividades ilegales o dañinas, involucrarse en foros que fomentan discursos de odio y narrativas falsas sobre una religión o grupo étnico, o interactuar en chats comprometedores con adultos a través de juegos online.
Dado que restringir el acceso a internet no es la mejor opción para evitar estas conductas, lo más recomendable es educar.
La navegación segura también se extiende a un diálogo abierto con niños y adolescentes sobre los riesgos del internet y los sitios web que no deberían de visitar.
Es responsabilidad de los padres y maestros conversar sobre las formas de aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece el entorno digital, evitando al mismo tiempo los peligros potenciales que inevitablemente existen.