Donar sangre es salvar vidas
Donar sangre es salvar una vida
Bajo el marco del Día Mundial del Donante de Sangre, el 14 de junio, nos unimos al lema: Donar sangre es un acto de solidaridad. Súmate al esfuerzo y salva vidas.
La necesidad de sangre es universal, pero el acceso para todos es un reto, siendo una problemática mayor en países de ingresos medianos y bajos. Según un informe publicado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en América Latina y el Caribe menos del 50% de los donantes de sangre son voluntarios. Es necesario llegar a un 100% para asegurar un suministro de sangre suficiente y seguro para transfusiones.
La donación de sangre es una acción altruista que ayuda a mantener saludables a personas enfermas. Su importancia radica en la necesidad de realizar transfusiones a diario y con esto proporcionar una atención integral de salud.
Algunos de los casos más usuales por los que se recurre al banco de sangre son:
- Mujeres con complicaciones obstétricas como embarazos ectópicos (desarrollados fuera del útero) o hemorragias antes, durante o después del parto.
- Niños con anemia grave, a menudo causada por paludismo o desnutrición.
- Personas con traumatismos graves ocasionados por accidentes.
- Pacientes que se someten a intervenciones quirúrgicas y médicas complejas.
- Personas con cáncer.
Ser voluntarios constantes para donaciones de sangre puede ayudar a salvar la vida de una persona en cuestión de minutos. Además, trae múltiples beneficios a quien la realiza, como la satisfacción de ayudar a alguien que lo necesita, obtener información sobre nuestro estado de salud en general, mejorar el flujo sanguíneo, reduce el riesgo de padecer infartos y accidentes cerebrovasculares, estimula la producción de nuevas células sanguíneas en el cuerpo y equilibra los niveles de hierro en la sangre.
En Costa Rica, la entidad encargada de suministrar la sangre donada es el Banco Nacional de Sangre de la Caja Costarricense de Seguro Social. Los requisitos para aplicar como donante son los siguientes:
- Edad: 18 a 65 años.
- Pesar más de 50 kilos y medir más de 1,50 metros.
- Antes de realizar la donación, no consuma grasas (mantequilla, natilla, chorizo, salchichón, huevo, tocineta), ni lácteos (leche, yogur, quesos).
- Portar la cédula de identidad nacional o de residencia, vigente y en buen estado.
- No haber estado resfriado en los últimos 15 días.
- Mencionar si toma medicamentos recuerde informarlo al médico que valora.
- No tener perforaciones ni tatuajes con menos de un año de antigüedad.
- Debe informar si está en periodo de menstruación para valorar la condición.
- No debe estar embarazada. Luego de un parto o aborto deberá esperar de 6 a 9 meses para poder donar, según la situación o si estuvo en periodo de lactancia.
- Debe estar hidratado y el día de la donación se recomienda tomar uno o dos vasos de agua unos 30 minutos antes de donar.
Una persona sana tiene la capacidad de restablecer la sangre donada hasta en 60 días, razón por la que es capaz de donar sangre cada 2 meses. Por ello, desde Emergencias Médicas les invitamos a realizar voluntariamente esta acción para asegurar una atención integral y expedita ante cualquier situación.